01 mar 2024 Publicado en: Higiene Visual
Comenzando el año

El inicio del ciclo de actividades educativas es un momento crucial para establecer hábitos saludables, incluyendo el cuidado de la salud visual. En esta ocasión compartimos con ustedes información sobre cómo comenzar el ciclo de actividades educativas y algunos consejos para conservar un buen estado de salud visual:

Exámenes de salud visual: Se recomienda que todos los estudiantes se sometan a exámenes de salud visual al comienzo del año académico. Estos exámenes pueden identificar problemas de visión que podrían afectar el rendimiento y el bienestar general de los estudiantes de todas las edades.   Para aquellos que ya usan corrección visual, es recomendable asimismo chequear las condiciones en que se encuentran nuestros anteojos o lentes de contacto. Siempre es recomendable contar con más de un anteojo con la corrección actualizada para estar cubiertos en caso de pérdida o rotura.

 

Promoción de hábitos saludables: Los educadores pueden promover hábitos saludables entre los estudiantes, como sentarse a una distancia adecuada de la pantalla al usar dispositivos electrónicos, parpadear regularmente para mantener los ojos lubricados y tomar descansos periódicos para descansar los ojos.   Al final de la nota dejamos algunos consejos de higiene visual que son aplicables a todos y vale la pena tener presentes en todo momento.

 

Entorno de aprendizaje visualmente saludable: Es importante crear un entorno de aprendizaje que sea visualmente saludable. Esto incluye garantizar una iluminación adecuada en el aula, minimizar el deslumbramiento en las pantallas y proporcionar mobiliario ergonómico que promueva una postura adecuada.

 

Colaboración con padres y cuidadores: Los educadores pueden colaborar con padres y cuidadores para asegurarse de que los estudiantes reciban atención adecuada para su salud visual fuera del entorno escolar. Muchas veces son los propios estudiantes quienes manifiestan sus síntomas en el momento de mayor actividad en el aula, por lo cual la comunicación entre los docentes y los padres y cuidadores es de suma importancia.


¿Qué es la higiene visual?

La higiene visual se refiere a una serie de prácticas y hábitos destinados a proteger y mantener la salud visual. Estas prácticas están diseñadas para prevenir la fatiga ocular y promover el bienestar general. Algunos aspectos importantes de la higiene visual incluyen:

  • Descansos regulares: Es importante tomar descansos periódicos al realizar tareas que requieran una concentración visual intensa, como trabajar frente a una pantalla o leer durante largos períodos de tiempo. Los descansos ayudan a reducir la fatiga visual y permiten que los ojos se relajen.

    Hay una regla muy difundida, que es la regla 20-20-20, que nos dice que cada 20 minutos de tarea visual cercana, debemos relajar la mirada durante 20 segundos, mirando a una distancia de 20 pies o más. Teniendo en cuenta que 20 pies son aproximadamente seis metros, se trata de relajar mirando algún escenario lejano durante algunos segundos. 

 

  • Parpadear con frecuencia: Cuando estamos frente a una pantalla o realizando tareas que requieren una atención visual sostenida, es común que parpadeemos con menos frecuencia. Sin embargo, parpadear regularmente ayuda a mantener los ojos lubricados y previene la sequedad ocular.

  • Ajuste de la iluminación: Es importante tener una iluminación adecuada al realizar tareas visuales. La iluminación demasiado brillante o demasiado tenue puede causar fatiga y dificultar la visión. Debemos cuidarnos de evitar el deslumbramiento y asegurarnos de que no haya reflejos molestos si estamos utilizando alguna pantalla. 

  • Postura adecuada: Mantener una postura adecuada al usar dispositivos electrónicos puede ayudar a reducir la tensión en los ojos y el cuello. Se recomienda sentarse a una distancia confortable de la pantalla y mantenerla a la altura de los ojos para reducir la necesidad de inclinar la cabeza hacia adelante o hacia atrás.

  • Uso de anteojos o lentes de contacto: Aquellas personas que requieran corrección visual deben usar anteojos o lentes de contacto según lo indicado. Usar la corrección adecuada nos asegura la mejor visión durante nuestras actividades y reduce la fatiga visual. 

  •  Visitas regulares al oftalmólogo: Es importante realizar controles regulares con un oftalmólogo. Estos exámenes pueden detectar afecciones oculares en etapas tempranas y ayudar a conservar en óptimo estado nuestra salud visual y ocular.

En resumen, el comienzo del año lectivo es un buen momento para revisar nuestros hábitos y comenzar este nuevo ciclo incorporando aquellos que hasta ahora no conocíamos o no habíamos adoptado y que nos permitirán tener un mejor rendimiento tanto académico como laboral.

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